¿Quién no ha llegado a su coche y se ha encontrado sobre tras el parabrisas un fajo de publicidad? Ante esta situación tenemos varias opciones, pero nunca debemos contemplar ejecutar la de tirarla al suelo. Nos han llegado quejas de varios vecinos que solicitan a sus conciudadanos más educación y ecologismo -las papeleras están para algo- y al Consistorio más observancia del cumplimiento de la ordenanza que prohíbe esta práctica tan asentada y no por ello legal.
Entendiendo que es complicado multar en estos casos ya que hay que cazar al infractor con las manos en la publi, sí que pedimos a la Policía una mayor atención. Tenemos varios infractores: los incívicos y las empresas que realizan esta práctica sabiendo que no la pueden realizar.