En la madrugada del martes al miércoles, el Grupo Municipal Socialista de Boadilla del Monte se encerró en el Ayuntamiento del municipio como medida de protesta por la reforma sanitaria que la Comunidad de Madrid está planteando.
Los tres ediles socialistas del municipio han estado reunidos toda la noche debatiendo alternativas a la privatización sanitaria en la Comunidad y, especialmente, en Boadilla.
Han expresado su preocupación sobre si el nuevo centro de salud "tendrá dotación suficiente de médicos" y si "será público o entrará dentro de los centros de salud privatizados por la Comunidad de Madrid".
Pablo Nieto, portavoz de los socialistas en el Ayuntamiento de Boadilla, ha declarado a Diario de Boadilla que “el encierro ha resultado muy positivo. Los dos próximos días son claves para el futuro de la sanidad madrileña, ya que se aprobarán los presupuestos sanitarios y no habrá marcha atrás”.
El encierro duró unas doce horas, de nueve de la noche a nueve de la mañana en las que, según ha informado el propio Pablo Nieto, no se produjo ningún incidente por lo que fue un encierro bastante pacífico. Solamente hubo un pequeño motivo de conflicto y es que la pancarta que los integrantes socialistas habían instalado en el balcón del ayuntamiento tuvo que ser retirada por petición de la Policía, ha informado el portavoz.
