Las obras de conexión de Viñas Viejas con El Encinar, por encima de la M-50, están a punto de finalizar. Este nuevo vial, que estará operativo a finales de abril, ayudará a descongestionar el tráfico de la M-513 en su confluencia con esta vía de circunvalación y permitirá distribuir mejor el flujo de vehículos en el municipio, ofreciendo más alternativas para recorrer y salir del mismo.
La conexión se ha realizado a través de un puente que se construyó, previendo esta actuación, entre la glorieta Equipo Paralímpico Español, en El Encinar, y la glorieta de intersección de las calles Miguel Ángel Cantero Oliva y Jaime Ferrán, en Viñas Viejas.
El nuevo enlace tendrá un carril por sentido, un carril bici y acera. La calzada se duplicará antes de llegar al puente sobre la M-50, hasta su finalización. La avenida contará con iluminación LED, con sistema de telegestión, y permitirá que alguna línea de autobús que da servicio en Boadilla pueda pasar por El Encinar para satisfacer la demanda de transporte público de esta zona de la ciudad.
El presupuesto de la obra ha ascendido a 2.354.660 euros, IVA incluido.
Esta actuación se suma a otras que el Ayuntamiento ha realizado en los últimos años para mejorar la movilidad, como la nueva conexión de la M-513 con la avenida Isabel de Farnesio o la nueva rotonda en esta misma carretera, a la altura del colegio Mirabal infantil.
En los próximos meses comenzarán las obras de un nuevo carril desde la avenida Infante don Luis hacia la M-50 dirección sur y, en la próxima legislatura, la remodelación de la rotonda que une la avenida Condesa de Chinchón, la calle Monte Segovia y la M-513, que se desdoblará desde este punto hasta la M-50 y se deprimirá para no congestionar este punto.