El pasado 9 de octubre, el Ayuntamiento de Boadilla recibió un crédito de 30 millones de euros, aprobado en el Pleno Extraordinario, el cual ha provocado algunas críticas por parte de la oposición socialista.
Con el préstamo obtenido por el Consistorio boadillense se intentará garantizar el patrimonio urbanístico como principal activo del municipio. «En menos de una década la población se ha duplicado, siendo preciso incrementar notablemente equipamientos como son colegios, escuelas infantiles, espacios culturales, deportivos, sociales, vivienda, e infraestructuras urbanas de toda índole, bien sea en el casco urbano, en los nuevos desarrollos, o en las urbanizaciones históricas», según ha destacado el equipo de gobierno.
Parte de este crédito además irá destinado a pagar los convenios expropiatorios del Plan General de Ordenación Urbana de 2003 que avale la titularidad municipal del suelo y poniéndolo en valor como inversión, dotándolo de nuevas infraestructuras.