El Consistorio de Boadilla ha suscrito un protocolo para coordinar las actuaciones conjuntamente con la Guardia Civil y la Policía Local para proteger a las víctimas de la violencia de género. Este protocolo supone la materialización del convenio que se firmó en enero junto con la Secretaría de Estado de Interior, cuyo objetivo es velar por que se cumplan las medidas judiciales de las mujeres que sufren este tipo de violencia.
Esta colaboración entre la Guardia Civil y la Policía Local de Boadilla se dará en todas las fases del procedimiento, desde que se tiene conocimiento de los hechos, incluyendo la remisión de las diligencias de denuncia a la Guardia Civil en caso de que sea realizada a la Policía Local.
El procedimiento engloba las diversas actuaciones policiales que se realicen: indagaciones, valoración del riesgo, aplicación de medidas de protección, actuaciones sobre el presunto agresor, traslados iniciales de la víctima., denuncia de los hechos y elaboración del atestado, control sobre el agresor, comunicación con otras instituciones y elaboración de informes.
Por lo tanto, las órdenes de protección dictadas por los Juzgados de Instrucción y los de Violencia sobre la Mujer se repartirán entre los agentes de Guardia Civil y Policía Local desde el Punto de Repatro Centralizado, situado en el cuartel de la Guardia Civil de Boadilla.
La Policía recibirá la documentación de las órdenes de protección que se le asignen, y destinará los medios personales y materiales necesarios para hacer el seguimiento de los casos. Por otro lado, los servicios de asistencia en casos de violencia de género se encargarán de valorar los casos que se producen en el municipio. De esta forma, ayudarán con recursos, asesoramiento y asistencia psicológica, legal y social a las mujeres que lo necesiten. A estas actuaciones de colaboración se suma el Punto Municipal del Observatorio sobre la Violencia de Género.
Boadilla del Monte es una localidad especialmente concienciada con esta lacra social, ya que aún recuerda a María Piedad García Revuelta, vecina que fue víctima de un presunto caso de violencia de género en 2010, y cuyo rastro continúa siguiéndose. De hecho, el alcalde de Boadilla, Antonio González Terol, ha pedido a la Junta Local de Seguridad que siga investigando el caso pese a que aún no se haya encontrado ninguna pista que esclarezca qué paso.