Parece que la restauración es una apuesta segura en Boadilla. Más concretamente, las franquicias. Estos últimos días han abierto nuevos locales los grupos Vips y La Sureña, dos franquicias muy conocidas en Madrid.
Abrir un restaurante en esta época es un gran riesgo; no obstante, parece que Boadilla no tiene ese problema. O, por lo menos, no tan acentuado. La apertura de estos dos nuevos restaurante supone una inyección para el consumo en el municipio. Además, genera inevitablemente más puestos de trabajo. Está claro que no van a solucionar el problema del paro, pero dan un respiro a varios vecinos.
Abrir nuevos restaurantes siempre es un riesgo. La clave está en que sean de una franquicia -lo cual es un buen seguro económico-, ya que no parten completamente de cero. Prueba de ello son el nuevo Vips y La Sureña de Boadilla. Desde aquí esperamos que tengan éxito, y que sean un ejemplo de que el emprendimiento es la mejor solución en tiempos de crisis.