Mientras que el billete sencillo seguirá costando un euro, el abono transporte experimentará un incremento medio del 5,75 % y el billete de diez viajes del 5,71%, es decir, de 40 céntimo con lo que se coloca en los 7,40 euros.
La consejería de Infraestructuras explicó que el encarecimiento de los servicios se debe al fuerte incremento de la electricidad y del gas, ya que la red de Metro consume tanta energía como una ciudad de 150.000 habitantes y el 20% de los autobuses de la EMT funcionan con gas para automoción.