Cuando un poro está obstruido y se cierra, pero sobresale de la superficie de la piel, se produce un punto blanco. Si un poro está obstruido pero permanece abierto, la capa superior puede oscurecerse y se produce una espinilla. A veces la pared del poro se abre, permitiendo que el sebo, las bacterias y las células de la piel muertas se abran paso por debajo de la piel, lo cual produce una pequeña infección de color rojo llamada grano. Los poros obstruidos que se abren a un nivel muy profundo de la piel pueden causar nódulos, que son protuberancias o quistes infectados más grandes que los granos y pueden ser dolorosos.
Si cuando te miras en el espejo ves que tienes un granito en la cara, no lo toques, ni lo aprietes, ni lo escarbes. Esto podría ser difícil, ya que puede ser muy tentador tratar de sacártelo. Pero si jugueteas con los granos puedes aumentar la inflamación hurgándolos o abriéndolos. ¡Además, el aceite de tus manos empeora las cosas! No obstante, lo más importante es que hurgar los granos puede dejar pequeñas cicatrices permanentes en la cara.
Nadie sabe exactamente cuál es la causa del acné. Es probable que los cambios hormonales, tales como los que ocurren en la adolescencia o el embarazo, tengan alguna relación con su aparición.
Existen muchos mitos acerca de las causas del acné. Con frecuencia se culpa al chocolate y las comidas con elevado contenido de grasa, pero en la mayoría de los casos hay pocas evidencias de que la comida tenga algún efecto sobre el acné. Tampoco la actividad sexual o la masturbación empeoran el acné. Otra creencia común es que la piel sucia puede favorecer el acné; sin embargo, los puntos negros y las espinillas no son producto de la suciedad. El estrés no produce acné, pero puede empeorarlo. También lo empeoran: maquillajes con base de aceite, geles y fijadores en aerosol para cabello -hay que utilizarlos lo más alejado posible de la cara-.
Estas son algunas medidas higiénicas en el caso de que tenga acné:
• Limpie su piel con suavidad
• Intente no tocarse la piel
• Evite el sol
¿Qué me puede prescribir el médico?
Aunque existen productos en el mercado que no necesitan prescripción médica, sería aconsejable consultar lo más pronto posible a su médico ya que los productos que se obtienen sin prescripción médica pueden causar efectos secundarios tales como irritación cutánea, quemazón o enrojecimiento en algunas personas.
Su médico le puede recomendar antibióticos que pueden ser muy efectivos para el tratamiento del acné. Pueden tomarse por vía oral o usarse sobre la piel en forma de loción, crema o gel.
Si usted usa un retinoide debe evitar el sol o usar un protector solar fuerte pues este medicamento aumenta el riesgo de quemadura solar severa. Las jóvenes que están embarazadas o que pudieran quedar embarazadas no deberían usar un retinoide llamado tazaroteno -nombre de marca: Tazorac- porque éste puede causar defectos de nacimiento.
Por lo tanto, es recomendable seguir las instrucciones de su médico ya que está capacitado para ayudar a hacer que tu piel luzca lo mejor posible.