Las máquinas expendedoras de Metro Ligero Oeste, tanto en Pozuelo como en Boadilla, cuentan con un sistema de megafonía de apoyo a los invidentes para orientarles sobre los pasos que deben seguir para la adquisición del billete, lo que convierte a las estaciones de este transporte, junto con otras medidas en «cien por cien accesible», según ha informado la compañía.
Las estaciones están equipadas para facilitar el acceso y el descenso a los usuarios, por lo que se han construido rampas de acceso a los andenes, con barandillas laterales para facilitar el desplazamiento horizontal. Como medida adicional de seguridad, todas las estaciones cuentan con una banda amarilla en relieve de límite de andén e inicio de vía, para personas con limitaciones de visión.
Asimismo, emiten señales sonoras que avisan de la apertura y cierre de puertas. Adicionalmente, hay instalado un sistema de megafonía, tanto en los vehículos, a través del cual se indica el nombre de las estaciones, como en las paradas.