Muerte en la red
Jennifer Marsh es una agente del FBI, viuda y con una hija pequeña, especializada en delitos informáticos. Desde su ordenador planifica y ordena detenciones de piratas y otros delincuentes de la red. Pero no está preparada para enfrentarse a un reto inimaginable: un joven psicópata secuestra a hombres y cuelga en la red las imágenes en directo de su tortura. Y en la medida en que más personas visiten la página web se aceleran los sufrimientos y la muerte del individuo en cuestión. Además, el asesino es un experto informático por lo que es casi imposible detectar su rastro y capturarlo. La situación se tensa cuando la agente y su hija se convierten en objetivo del criminal.
Rastro oculto es un filme realizado con cierta elegancia, a pesar de la dureza de ciertas escenas, por el director de películas como Frecuency. Y aunque es muy lineal y simple en algunos momentos, pone sobre el tapete un interesante tema de ética de la imagen: la responsabilidad de los usuarios de Internet (lo mismo se podría decir de la telebasura) en el fomento de los contenidos ilegales o inmorales que se difunden por la red. La película muestra como el afán de morbo de ciertos internautas los convierte en cómplices del asesino. También otro personaje de Rastro oculto sufre las consecuencias posibles, en algunos casos, de los encuentros a ciegas concertados por Internet.
Esta película protagonizada por Diane Lane, que se esfuerza por crear un personaje verosímil, aunque algunas situaciones de Rastro oculto no lo sean, se suma a las críticas sobre el abuso de la imagen que también aparecen en otros filmes y otras novelas, como la reciente Ácido sulfúrico de Amélie Nothomb, que trata sobre un reality show que recrea un campo de concentración y donde el público puede votar si los concursantes serán, no ya expulsados del programa, sino ejecutados. Un aviso sobre los posibles derroteros, si no se remedia la situación, de la televisión del futuro.
Dirección: Gregory Hoblit. Intérpretes: Diane Lane, Billy Burke, Colin Hanks, Joseph Cross, Mary Beth Hurt, Peter Lewis, Perla Haney-Jardine. Guión: Robert Fyvolent, Mark Brinker, Allison Burnett. Música: Christopher Young. Fotografía: Anastas N. Michos. Distribuye en Cine: Universal. Duración: 100 min. Público apropiado: Jóvenes-adultos. Género: Thriller.
Jennifer Marsh es una agente del FBI, viuda y con una hija pequeña, especializada en delitos informáticos. Desde su ordenador planifica y ordena detenciones de piratas y otros delincuentes de la red. Pero no está preparada para enfrentarse a un reto inimaginable: un joven psicópata secuestra a hombres y cuelga en la red las imágenes en directo de su tortura. Y en la medida en que más personas visiten la página web se aceleran los sufrimientos y la muerte del individuo en cuestión. Además, el asesino es un experto informático por lo que es casi imposible detectar su rastro y capturarlo. La situación se tensa cuando la agente y su hija se convierten en objetivo del criminal.
Rastro oculto es un filme realizado con cierta elegancia, a pesar de la dureza de ciertas escenas, por el director de películas como Frecuency. Y aunque es muy lineal y simple en algunos momentos, pone sobre el tapete un interesante tema de ética de la imagen: la responsabilidad de los usuarios de Internet (lo mismo se podría decir de la telebasura) en el fomento de los contenidos ilegales o inmorales que se difunden por la red. La película muestra como el afán de morbo de ciertos internautas los convierte en cómplices del asesino. También otro personaje de Rastro oculto sufre las consecuencias posibles, en algunos casos, de los encuentros a ciegas concertados por Internet.
Esta película protagonizada por Diane Lane, que se esfuerza por crear un personaje verosímil, aunque algunas situaciones de Rastro oculto no lo sean, se suma a las críticas sobre el abuso de la imagen que también aparecen en otros filmes y otras novelas, como la reciente Ácido sulfúrico de Amélie Nothomb, que trata sobre un reality show que recrea un campo de concentración y donde el público puede votar si los concursantes serán, no ya expulsados del programa, sino ejecutados. Un aviso sobre los posibles derroteros, si no se remedia la situación, de la televisión del futuro.
Dirección: Gregory Hoblit. Intérpretes: Diane Lane, Billy Burke, Colin Hanks, Joseph Cross, Mary Beth Hurt, Peter Lewis, Perla Haney-Jardine. Guión: Robert Fyvolent, Mark Brinker, Allison Burnett. Música: Christopher Young. Fotografía: Anastas N. Michos. Distribuye en Cine: Universal. Duración: 100 min. Público apropiado: Jóvenes-adultos. Género: Thriller.
