La pocería es uno de esos servicios que a menudo pasan desapercibidos ante las personas, hasta que se presenta una situación en la que se entiende su importancia, sobre todo cuando hablamos de urgencias.
Básicamente, la pocería se encarga del mantenimiento, reparación y construcción de redes de saneamiento y alcantarillado. Los profesionales que se han formado en esta área, conocidos como poceros, son fundamentales para garantizar la correcta función de las infraestructuras subterráneas, las cuales permiten tanto la evacuación apropiada de aguas residuales como la gestión de aguas pluviales.
Sin embargo, a pesar de manejar esta información superficial, existen quienes no tienen en claro cuando llamar al pocero. En este sentido, si crees necesitarlo, o no sabes si es el profesional correcto, incluso si quieres averiguar cuál es tu mejor opción, te ayudamos proporcionándote información complementaria.
¿Cuándo es necesario contratar a un pocero?
Contratar a un pocero se vuelve crucial en situaciones específicas relacionadas con la red de saneamiento y alcantarillado. Para que te hagas una idea, presentamos algunas de las circunstancias más comunes en las que se requiere la intervención de un pocero:
⇒ Atascos en las tuberías. Uno de los problemas más frecuentes que los poceros solucionan son los atascos en las tuberías, ya sea en hogares, edificios o infraestructuras públicas. La razón de los atascos varían, pero en general pueden causar graves inconvenientes y posibles daños si no se abordan a tiempo, y es que las tuberías cumplen con un papel vital en el día a día, por ello, no deben dejarse para luego.
⇒ Fugas y filtraciones. Las fugas en las tuberías de saneamiento a veces resultan en problemas de humedad, malos olores y, en el peor de los casos, daños estructurales. Un pocero será capaz de localizar y reparar estas fugas eficientemente.
⇒ Inspección de tuberías. Es recomendable realizar inspecciones periódicas como método de prevención. Los poceros emplean tecnologías avanzadas, como cámaras de inspección, entre otros, para hacer detecciones sobre irregularidades antes de que se conviertan en grandes inconvenientes, ya que de ser así, suponen más tiempo y más dinero.
⇒ Reparación de tuberías. Ya sea debido a desgaste, corrosión o daños accidentales, las tuberías pueden requerir reparaciones significativas. Serán entonces los profesionales los que llevarán a cabo estos trabajos de manera segura y eficiente.
⇒ Obras de nueva construcción. En la construcción de nuevos edificios o viviendas, la instalación de un sistema de saneamiento adecuado es esencial. Ellos se van a encargar de diseñar e implementar estos sistemas.
⇒ Desbordamientos y problemas de alcantarillado. Durante lluvias intensas, es común que los sistemas de alcantarillado se vean desbordados. Dichos expertos pueden intervenir para limpiar y desatascar las redes de alcantarillado, asegurando su correcto funcionamiento de allí en adelante.
La rapidez de atención es clave
Sea cual sea la situación entre las indicadas anteriormente u otras relacionadas con el saneamiento y las redes de agua potable, la rapidez en la respuesta y solución es fundamental. Un problema en las tuberías o el alcantarillado puede escalar rápidamente, afectando no solo a una vivienda particular, sino también a toda una comunidad.
Por ejemplo, una obstrucción no tratada a tiempo genera desbordamientos, malos olores y hasta problemas de salud pública. Por ello, contar con poceros que tengan la disposición de intervenir rápidamente es crucial para mitigar daños y evitar complicaciones mayores.
Además, la rapidez no solo implica una intervención inmediata, sino también una solución eficiente y duradera. Los profesionales están equipados con herramientas y tecnologías avanzadas que les permiten diagnosticar y resolver problemas en tiempo récord, minimizando así el impacto negativo en el día a día de las personas afectadas.
Y sin hacer obra… ¡Mucho mejor!
Uno de los mayores inconvenientes al enfrentar problemas en las redes de saneamiento es la necesidad de realizar obras que no solo son caras, sino que igualmente llegan a ser invasivas y disruptivas para los habitantes de un edificio o comunidad. Sin embargo, los avances tecnológicos en el campo de la pocería han permitido desarrollar métodos que evitan la necesidad de abrir zanjas y realizar excavaciones, facilitando así una solución.
Contratar a expertos en tecnologías sin zanja ofrece numerosos beneficios, pues estamos hablando de un personal altamente cualificado que utilizan técnicas como la rehabilitación de tuberías mediante manga continua o el uso de robots de fresado, y hasta otros medios como cámaras CCTV, permitiendo reparar y renovar tuberías desde el interior. Después de todo, para ello están pensadas y diseñadas cada uno de tales elementos.
Esto acelera el proceso y reduce significativamente los gastos, así como las molestias asociadas con las obras tradicionales. Además, al evitar la excavación, se preservan las estructuras y el paisaje urbano, contribuyendo a una gestión más sostenible y respetuosa con el entorno. No obstante, la pregunta en este punto puede ser ‘¿Qué poceros ofrecen este servicio?’ ¡Pues tenemos la respuesta!: los Poceros sin Zanja.
Poceros sin Zanja en Madrid: una gran opción
Si quieres saltarte el proceso de búsqueda, y estás en Madrid, te recomendamos una opción destacada para servicios de pocería, que es la empresa Pocería sin Zanja. Esta compañía se especializa en la rehabilitación de tuberías de las redes de saneamiento y de agua potable sin necesidad de abrir zanjas.
Desde el año 2000 que vienen operando, este enfoque innovador, es decir, el resolver temas de pocería sin obra, y de manera rápida, les ha permitido realizar reparaciones y mantenimiento siendo menos invasivos, ahorrando tiempo, reduciendo las molestias y costos asociados a los métodos tradicionales.
Pocería sin Zanja es pionera en la introducción de tecnologías sin zanja adaptadas a la rehabilitación de la red de mantenimiento de las ciudades. Utilizan métodos avanzados como la inserción de tuberías flexibles y la aplicación de resinas especiales para reparar tuberías desde el interior.
Debido a su ética, valores y objetivos, garantizan un trabajo rápido y eficiente, minimizando en el proceso el impacto en el entorno, lo que evita la necesidad de romper calles y aceras. Sin duda es una modalidad especialmente beneficiosa en áreas urbanas densamente pobladas como Madrid.