El próximo mes de septiembre comenzará la restauración de la cocina histórica del Palacio del Infante D. Luis, que realizará la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid.
Se trata de un paso más en la recuperación de un edifico que poco a poco va recuperando la imagen que tuvo en el siglo XVIII.
Los trabajos incluirán, entre otros, la restauración del suelo, limpieza de las paredes, saneamiento de la antigua chimenea o la colocación de una instalación eléctrica nueva. La actuación contará con un presupuesto cercano a los 50.000 euros.
En este momento se está desarrollando una fase previa de investigación arqueológica, con catas sobre el muro de la cocina que arrojan como conclusión que esta zona fue resultado de la ampliación de un edificio preexistente y no de sustitución de este, tal como hasta ahora se había creido. En 1761, D. Luis adquirió a la marquesa de Mirabal el Señorío de Boadilla del Monte, que incluía la casa o palacio de las Dos Torres. Posteriormente el Infante encargó a su amigo, el arquitecto Ventura Rodriguez, su nuevo palacio, si bien se desconocía si éste demolió el palacio primigenio o amplió el ya existente.
Las conclusiones de los actuales trabajos desarrollados por los arqueólogos avalan la hipótesis de los técnicos municipales, tras analizar los muros de la cocina, de que, al menos el lateral del Palacio del Infante D. Luis, fue fruto de una ampliación del palacio original del siglo XVII.