Villarejo dixit. Ya sé que no es un argumento de autoridad. Que no hay que asomarse a las cloacas del Estado. Pero que el ex comisario, ahora en la cárcel, José Manuel Villarejo, le cuente al marido de Cospedal que Ángel Galindo, concejal de Alternativa por Boadilla, cobró 100.000 euros del PSOE, tiene su morbo.
Y ya se sabe que el que calla otorga. Si Villarejo dice que Galindo cobra del PSOE y el concejal de APB se calla, debe ser que así es. Por mucho que su partido lleve la sigla “A” de Alternativa o que vaya diciendo que es independiente.
Ángel Galindo hizo muchos amigos a costa del Gürtel. Defender a José Luis Peñas le ha traído grandes ventajas ante algunos medios de comunicación. También ante el PSOE. Él sabrá por qué. Con muchas ventajas económicas. Tanto, tanto, que los socialistas le ha soltado 100.000 euros sin especial problema.
Galindo acudía a visitar a altos cargos del gobierno socialista, cuando Rubalcaba era Ministro de Interior. ¿De qué hablarían en esas conversaciones? ¿Qué tendría que aportar un humilde concejal independiente, de pueblo, al Ministerio del Interior? ¿Y qué es eso tan valioso que aportó que le incrementó 100.000 euros su cuenta corriente?
Galindo debe una explicación. Porque ni parece que su partido sea una alternativa para Boadilla, ni él parece independiente. Más bien, todo lo contrario.
Boadilla es ya una gran ciudad. Ha llegado el momento de apartar el caciquismo pueblerino. Más cuando queda constatado que APB y PSOE son lo mismo.
