El Ayuntamiento de Boadilla ha cerrado el pasado año con un saldo positivo de más de seis millones de euros y ya van cinco años sin resultados deficitarios.
La gestión responsable y eficaz del dinero público es un síntoma de buen gobierno y eficacia. Boadilla es una ciudad ideal para vivir y goza de unos servicios de alto nivel. La calidad no está reñida con la austeridad.