El Ayuntamiento de Boadilla del Monte ha realizado un estudio técnico de los ejemplares arbóreos de alineación del municipio (23.020) así como los que se encuentran en los parques y zonas verdes de la localidad (2.405). El objetivo es conocer las características y el estado de todos los árboles para garantizar que puedan cumplir adecuadamente sus funciones que, en el ámbito urbano, consisten en aprovechar el espacio público, embellecer y aumentar el bienestar de los habitantes (brindar sombras, refrescar, producir oxígeno, regular la humedad ambiente, disminuir ruidos y vientos y retener partículas y gérmenes ambientales).
El estudio ha identificado la especie a la que pertenece cada uno de los árboles, su localización en el municipio, el estado fitosanitario en el que se encuentra así como la presencia de daños y las necesidades de mantenimiento. A estos parámetros se ha sumado un análisis estético (porte, simetría de la copa, atractivo ornamental) y un análisis ambiental para determinar las posibles interferencias entre el árbol y su entorno (tamaño de los alcorques, falta de espacio en la parte aérea, proximidad a edificios o afección a la visibilidad).
Las conclusiones determinan que el estado de conservación del arbolado del municipio es en general bueno. Un 2,7% presenta alguna evidencia de problema sanitario y solo un 0,2% (22 ejemplares) tiene problemas serios de plagas o enfermedades que ponen en riesgo su estabilidad o supervivencia. El 1,3% de los árboles analizados estaban secos. Tanto estos como los que presentan alto riesgo están siendo retirados por el Ayuntamiento.
El 50% del arbolado analizado se concentra en Residencial Siglo XXI, los nuevos sectores y el Polígono Industrial Prado del Espino lugares en los que hay hasta 46 especies distintas con predominio, como en el resto del municipio, de plátano de sombra y arce negundo; las urbanizaciones históricas tienen el 44% del arbolado, con 66 especies distintas aunque predominan el pino piñonero y el pino carrasco. Por último, el 6% del arbolado está en el núcleo histórico y Residencial las Eras, también con 46 especies distintas.
El estudio, que se actualizará cada seis meses, aporta también recomendaciones sobre las especies más adecuadas para las nuevas plantaciones, cuáles habría que ir sustituyendo y el tipo de poda que se debe realizar en cada caso.