La nueva biblioteca abría sus puertas este lunes y quise acercarme. ¡Sorpresa! Al llegar me encontré, sin exagerar, a más de un centenar de personas que esperaban al alcalde. Niños de todas las edades, padres, abuelos, jóvenes. La ilusión se reflejaba en sus caras. Me atrevo a escribir que hasta el propio Terol se sorprendió de tal recibimiento. A decir verdad, la gente no esperó la protocolaria llegada del secretario de Estado de Educación e irrumpió antes en las dependencias.
La inauguración de la biblioteca José Ortega y Gasset pone la guinda al pastel de las inauguraciones que han tenido lugar durante esta legislatura. El lunes era el último día y la joya de la corona estaba resplandeciente, no faltaba ni el más mínimo detalle. Una biblioteca a la altura de lo que reclaman y merecen los vecinos de Boadilla.
González Terol sabe lo que quieren sus vecinos, porque se ha pateado la calle desde antes de llegar a la Casa Consistorial. Ahorra arranca la campaña y Terol esboza la sonrisa que refleja la sensación del deber cumplido. Deja Boadilla del Monte mucho mejor de cómo la encontró. Sobre todo con más espacios culturales.