Porque el alcalde Antonio González Terol ha anunciado la eliminación de una Concejalía, la supresión de cuatro puestos eventuales y el reciclado del coche oficial que utiliza el alcalde como coche de Policía.
En concreto, desaparece la Concejalía de Educación, Familia, Infancia, Mujer y Personas Mayores, cuyas áreas se distribuirán entre las demás concejalías y la edil actual, Eva Peña, pasará a cobrar solo por plenos y comisiones, lo que supone un ahorro directo de unos 60.000 euros a las arcas municipales por este concepto.
En lo relativo a los cargos eventuales, el alcalde ha anunciado la reducción de cuatro de ellos, incluyendo el puesto de secretaría del Grupo Municipal Popular y ha invitado a las otras tres formaciones políticas a que hagan lo propio con la secretaría de sus grupos lo que elevaría a 7 los puestos de confianza eliminados en esta primera fase.
El ahorro por este concepto sería de entre 150.000 y 230.000 euros, si se incluyen las secretarias de todos los grupos municipales.
En cuanto al coche oficial, el alcalde ha anunciado su intención de transformarlo en un coche de Policía Local. A partir de este momento, el primer edil utilizará cuando sea necesario, uno de los coches de incidencias de baja gama que tiene el Ayuntamiento.
A estas medidas de austeridad, González Terol ha sumado una más relativa a la transparencia en la gestión. A partir de ahora las mesas de contratación no estarán presididas por concejales de manera que solo intervendrán funcionarios en el proceso de contratación, pudiendo asistir con voz pero sin voto el concejal impulsor del expediente y un concejal del grupo municipal de la oposición al que corresponda la presidencia de la Comisión de Vigilancia de las Contrataciones.
Todo un gesto político para volver a ganar la confianza de los ciudadanos en la clase política.