El hecho de que a mediados del mes de marzo no se tenga la planificación de ingresos y gastos para este ejercicio es para ellos síntoma de la mala gestión de los concejales.
Y aunque la legislación permite prorrogar los presupuestos de años anteriores, también establece la legislación que la aprobación definitiva del presupuesto general por el Pleno de la Corporación habrá de realizarse antes del día 31 de diciembre del año anterior al del ejercicio en que deba aplicarse.
El descontento de UPyD se ve acrecentado por la suspensión del pleno que debería haberse celebrado el pasado 26 de febrero.