¿Qué esconde Ángel Galindo ante esa curiosa propuesta de cambiar el nombre de la calle Avenida del Generalísimo por el de Esperanza Aguirre? ¿A qué viene ese repentino amor del líder de APB por la es Presidenta de la Comunidad de Madrid? ¿Por qué tiene tanta prisa en homenajear a la señora Aguirre? ¿Qué trata de ocultar o desviar? ¿Cómo se preocupa ahora por lo que pasa en Boadilla si hace meses que apenas pisa el Ayuntamiento?
Esto es una trampa, Galindo. Una trampa Galindera. Una más de las tuyas.
Deja, anda, que todo trascurra normalmente y que las cosas sucedan cuando tengan que suceder. Aunque debo reconocer que eres listo, muchos medios han comprado tu propuesta. Seguro que no te conocen.
