La fundadora ha dejado claro que el fruto de su proyecto y vocación personal ha sido posible gracias a la fuerza y el tesón de todos sus colaboradores y su permanente optimismo. Decía durante su agradecimiento que una sociedad es mejor porque son mejores los individuos que la componen, “más cultos, más perseverantes, más respetuosos, más fieles a sus valores. Así concebí mi tarea, y por ese camino creo se debería continuar en el mundo educativo”.
Asimismo, ha expuesto los credos con los que comenzó esta tarea y que aún todavía se mantienen vivos en su obra. La implicación de la familia, la educación en libertad, la cercanía del profesor y un centro educativo con alma propia comportan la excepcionalidad de su trabajo comenzado en 1961, que contó entonces con permiso para comenzar un proyecto piloto de educación mixta cuando ésta estaba todavía prohibida.
Su gran rectitud ha llevado a Josefina Unturbe Jiménez a crear una institución con alma familiar en la que, en sus palabras, se forman “hombres y mujeres cristianos, libres y responsables”. El método de educación integrada propuesto por la psicóloga, en la que el arte y la educación física eran partes esenciales de la educación, no llegó a España hasta 20 años más tarde, reconociéndose en 1985 en una directiva de la Comunidad Europea. Años después por la calidad de su gestión empresarial recibió el Master Internacional de Empresas.
De igual manera, su labor ha sido reconocida por el programa de la UNESCO de Escuelas Asociadas, que en datos del 2010 agrupa más de 8.000 centros en 180 países de Europa, donando a la institución la tarea de actuar a favor de la comprensión internacional con proyectos piloto para preparar a generaciones venideras.